el corazón

Perdida la naturalidad
fosilizado el sentimiento
el corazón late por costumbre
algo parecido a sacar la silla a la puerta
todos los días
para ver pasar el tiempo
con la mirada distraída en la pared de enfrente.

Algunos días
a veces
detrás de las rejas que forman las costillas
algo se agita
y nadie sabe si eso es acaso un simulacro de esperanza
o sólo el estertor de un músculo cansado.