mudanza
Notredame,
el gato,
se asoma a la puerta de su nueva casa
como un pájaro de reloj cucú
que ha perdido la noción del tiempo.
Entra y sale
sin traspasar jamás
el límite
que el miedo a lo desconocido
le ha marcado en el suelo
con una tiza invisible.
el gato,
se asoma a la puerta de su nueva casa
como un pájaro de reloj cucú
que ha perdido la noción del tiempo.
Entra y sale
sin traspasar jamás
el límite
que el miedo a lo desconocido
le ha marcado en el suelo
con una tiza invisible.
2 Comments:
Igual que al gato a los humanos también nos trazan líneas de tiza en el suelo marcándonos los límites que no debemos traspasar.
C.A. Makkkafu
el gato terminará venciendo el miedo y saltando las marcas. ya sabes, la curiosidad... incluso jugará con ellas. todo es cuestión de tiempo (en el caso del gato, claro). los humanos, bueno, ay, los humanos merecen comentarios aparte.
Publicar un comentario
<< Home